Frank hace una confesión condenatoria. Un tiroteo deja a Sarah preguntándose qué creer. Rawlins va a matar, de una vez por todas.
Frank le hace una confesión condenatoria a la agente Madani y acepta ayudar con el intercambio de rehenes para salvar a la familia de Micro. Sin embargo, no todo sale según lo planeado y un tiroteo deja a Sarah preguntándose qué creer. Con Frank en sus manos, Rawlins va a matar, de una vez por todas.