En el verano de 1940, Gran Bretaña estaba sola contra los nazis. Ahora descubrimos los restos que revelan la verdad que se esconde tras la batalla de Inglaterra.
En el verano de 1940, Adolf Hitler acababa de conquistar Francia y solo 30 kilómetros de mar le separaban de su próximo objetivo: Gran Bretaña. La poderosa Luftwaffe fue enviada a bombardear Gran Bretaña hasta lograr la sumisión del país, a destruir la Royal Air Force y a preparar el terreno para una invasión por mar. Ahora descubrimos los restos de aviones y navíos para revelar la verdad que se esconde tras la batalla de Inglaterra.