Becho es un niño que tiene el don de percibir la pasión en forma de una energía dorada. Un día, la energía de un grupo de músicos tocando es tan poderosa que atrapa a Becho y lo transporta al mundo soñado en el que habita “La Cumparsita.”
Becho es un niño que tiene el don de percibir la pasión en forma de una energía dorada, traslúcida y luminosa que emana de algunos cuerpos y en algunas circunstancias. Un día, la energía de un grupo de músicos tocando es tan poderosa que atrapa a Becho y lo transporta al mundo soñado en el que habita “La Cumparsita.” A partir de ese momento, Becho también va a generar energía dorada. Para multiplicar la pequeña fortuna que le han pagado por la venta de “La Cumparsita,” Becho se la apuesta a Skat, su caballo de carrera amigo, que entra último. Con este infortunio, Becho pierde hasta la energía que lo habitaba. Sin embargo, el destino se interpone y esta historia da un giro inimaginable.
Algunas secuencias o patrones de luces intermitentes pueden afectar a espectadores fotosensibles.